martes, 17 de mayo de 2016

ALGUNOS DE MIS LIBROS


                
Después de un paréntesis en las publicaciones de mi blog, continúo hoy y espero que podré seguir hablando de cuestiones relacionadas con mi  ciudad Castellón de la Plana. Para reiniciar esta nueva etapa de mi blog Castellón de la Plana, os incluyo una relación de parte de los libros que he escrito y editado, con un breve comentario sobre ellos. En el caso de que estuvierais interesados por alguno de ellos, podéis dirigiros a la editorial, cuyo nombre os incluyo o a mi directamente a través de miguelpastorgacia@hotmail.com y trataré de complaceros.



 Mi Barrio fue la primera novela que publiqué. La escribí conmovido por los problemas que causaba en la juventud el consumo de drogas. Durante aquellos años, heroína y cocaína habían destrozado a un gran número de jóvenes que encontraban en la noche y alrededor de algunos de sus ídolos, el marco adecuado para vivir experiencias de las que después no era fácil regresar. Editada por Uma Editores , en 2005, su acción se desarrolla en su mayor parte, en un barrio obrero de Barcelona, aunque el protagonista es de Morella (Castellón). Toda la edición se la regalé al "Proyecto Amigó" que estaban y siguen llevando una gran labor para la reinserción de jóvenes que tienen dificultades para salir del peligro que constituye la noche, las drogas y la velocidad. 
Aroma de Azahar, mi segunda novela, podría ser uno más de los numerosos hechos reales que a diario suceden a nuestro alrededor. También editada por Uma Editores (Chiva 21- 46018 Valencia) en 2006, al igual que Mi barrio, fue un obsequio a una ONG: UNICEF, con el fin de colaborar en sus fines sociales. La acción transcurre en escenarios de Sevilla, Castellón y Madrid. En el relato de ficción se combinan la seducción y el sexo, con el cariño, el amor, el trabajo, la amistad y los valores más tradicionales de cualquier familia de nuestra clase media. En la trama su protagonista (Fernando), orgulloso de su mujer y su pequeña empresa, se ve envuelto en una historia de pasión desenfrenada cuando conoce a una hermosa joven (Loreto). Fernando, convencido de que nada ni nadie podrá separarlo de su familia, cae en la tentación de abandonarlo todo para vivir una historia de de amor junto a la joven que ha conseguido embrujarlo con su perfume. 

En numerosas ocasiones he publicado en libros, revistas y prensa, artículos, cuentos y relatos sobre la historia, leyenda, mitología, cultura y costumbres de Castellón y su provincia. 
Historias y Leyendas de Castellón es un libro de 19 relatos de con ilustraciones propias, en las que describí en 2007, hechos de ficción que bien pudieron ser reales que pudieron suceder desde la fundación de la ciudad de Castellón de la Plana durate el siglo XIII, hasta finales del XX. Esta edición la regalé a la Asociación de padres de niños autistas de Castellón (APANAC), con la pretensión de que quienes vivieron como protagonistas o conocieron alguno de los hechos que se narran, pudieran disfrutar con el recuerdo de acontecimientos que influyeron, de manera muy notable en los orígenes y la historia de la comarca de la Plana. Así mismo, los los castellonenses más jóvenes podrían tener la ocasión de conocer, a través de estos diecinueve relatos, alguno de los sucesos más importantes acaecidos en su tierra.

La noche del 28 al 29 de septiembre de 1949, Castellón de la Plana vivió una de las tragedias mayores de su historia. El Río Seco, que atraviesa su término municipal, desde el oeste hasta que desemboca en el mar, es uno de esos barrancos por los que sólo circula agua durante las grandes tormentas. Aquella noche de San Miguel, el cauce del río Seco resultó insuficiente. Los puentes construidos para atravesarlo se convirtieron en auténticas presas que consiguieron elevar el nivel del agua hasta que el Río Seco se desbordó en las inmediaciones del Estadio Castalia. Las aguas y escombros que circulaban por el río, invadieron la ciudad y la huerta. Se produjeron todo tipo de daños materiales en las fincas rústicas  e incluso en numerosas viviendas de los barrios de la Guinea y els Mestrets. Así mismo durante aquellos años de posguerra algunas familias vivían en chabolas, en el propio cauce. Los rudimentarios materiales de sus muros y cubiertas no pudieron soportar la corriente y doce cadáveres fueron recogidos aquella misma noche o durante el día de San Miguel. La edición de esta novela que combina hechos históricos con una historia de ficción, fue regalada a AFANIAS que acababa de terminar sus nuevas instalaciones en la Cuadra Portollés DP 12006 de Castellón.

Editada por Carena (carena@carenaeditors.com) en 2009, en esta novela que combina ficción y realidad, se describen los grandes acontecimientos históricos acaecidos en Castellón de la Plana durante el periodo comprendido entre los años 1935 y 1968, a través de la historia de un inmueble de los conocidos en estas tierras de labradores, como "Una casa con entrada de carro. 
Tres generaciones habitaron aquella vieja casa de la calle Gobernador Bermúdez de Castro de la capital de la Plana desde su construcción durante los años veinte del pasado siglo, hasta su demolición en la década de los sesenta cuando la especulación y el boom inmobiliaro terminaron con parte de la historia de la capital de la Plana. 
Los moradores de la Vieja Casa, personajes imaginarios, pero que bien hubieran podido representar a cualquiera de las familias de la época vivieron años de guerra, hambre, miseria y tragedias, pero también momentos de esperanza e ilusión en un futuro mejor. 
                                                                                                     
 El 9 de marzo de 1810, vecinos de Castellón de la Plana, a los que se unieron iguales de Vila-real y Almassora, se levantaron contra las tropas de Napoleón, comandadas por el mariscal Suchet. Fue un acto popular y heroico en el que personas anónimas, con palos y cuchillos, se enfrentaron a la caballería bien pertrechada de los franceses. En esta novela editada por Sar Alejandría (info@saralejandriaediciones.com) traté de describir, de una manera amena, los acontecimientos que precedieron y siguieron a este episodio valeroso y significativo de la historia de la comarca de la Plana durante la conocida como Guerra del Francés (Guerra de la Independencia), entre los años  1807 a 1814.   

La Historia de la provincia de Castellón ha sido tratada, en numerosas obras, a traves de los hechos puntuales ocurridos en tierras castellonenses a lo largo de los tiempos. En esta obra editada por Sar Alejandría en 2016, se ofrece la Historia de Castellón dentro de la Histsoria Universal. Un nuevo punto de vista que sitúa a la de los castellonenses que habitaron estas tierras desde las pinturas rupestres, hasta los sucesos de las Tierras Gemelas de Nueva York. Una especie de ensayo con ilustraciones propias.    
                                                                                    

viernes, 12 de febrero de 2016

XXVII LA PROVINCIA DE CASTELLÓN A FINALES DEL XIX. CASTELLONENSES EN LA GUERRA DE CUBA

A medida que se acercaba el final del siglo XIX, la economía de la provincia de Castellón, al igual que la de otras muchas, ya no dependía, de manera exclusiva, de la agricultura. Distintas industrias, de manera especial las del sector cerámico y textil, se instalaron en la capital y también en otras poblaciones de la Plana. Las fábricas permitían que numerosas familias comenzaran a recibir ingresos con cieta regularidad y no dependieran de las circunstancias atmosféricas. 
   El cultivo de los cítricos se impuso en los términos municipales más próximos a la costa y los puertos de Vinaroz, Grao de Castellón y Burriana, no solo se dedicaban a la pesca, sino también a embarcar los productos que se fabricaban en la comarca, así como al comercio de cítricos. Las poblaciones costeras iban prosperando. Las comunicaciones mejoraron y los pueblos del interior parecían estar más cerca de la costa. Algunos edificios de propiedad privada embellecieron la capital en la que se había construido la Plaza de Toros y el Teatro Principal. Así mismo el puerto del Grao, durante tanto tiempo solicitado, fue declarado de utilidad pública el día 10 de junio de 1882, de acuerdo con el proyecto del ingeniero don Leandro Alloza y el impulso de Ruiz Vila. 
   Con motivo del  casamiento de Alfonso XII con su prima María de las Mercedes de Orleáns y Borbón se celebró de manera muy especial en Castellón de la Plana. Además de los festejos que solían ser habituales en estos casos, se acordó dotar con 375 pesetas a cada uno de los niños que nacieran durante aquellos días, cantidad que recibirían cuando contrajeran matrimonio. Sin embargo, la joven esposa de don Alfonso falleció cuando contaba dieciocho años de edad por lo que el día 4 de junio de 1878 se celebró una misa de campaña a la que asistieron todas las autoridades civiles y militares. 

   CASTELLONENSES EN LA GUERRA DE CUBA A finales del siglo XIX el gobierno central decidió que diecinueve batallones de la península debían incorporarse a la contienda entre los Estados Unidos y España. Por este motivo la noche del 11 al 12 de febrero de 1896, partió de la estación de ferrocarril situada junto al parque de Ribalta, un batallón del Regimiento Otumba que tenía su sede en Castellón de la Plana. En fechas posteriores tres compañías más salieron con el mismo destino desde el puerto de Valencia. Alrededor de mil setecientos militares partieron desde la capital de la Plana y alrededor de seiscientos hombres de esta provincia pudieron fallecer en aquella guerra. 

   ARTISTAS CASTELLONENSES DEL SIGLO XIX.- Tomás Viciano y sus hijos José y Francisco Viciano Martí eran conocidos como los santeros. Su formación académica la llevaron a cabo en Valencia. El mayor estudió en la Escuela de San Carlos. Su obra más importante es la estátua de Jaime I que se incorporó al monumento proyectado por el arquitecto don Godofredo Ros de Ursinos para embellecer la plaza Nueva, actual avenida del Rey don Jaime. Su hermano Francisco, becario de la diputación esculpió el Séneca que se puede admirar en el Museo de Bellas Artes de Castellón. El hermano menor se dedicó a la imaginería y la docencia. 
   Entre los pintores cabe destacar al pintor segorbino Manuel Camarón que se formó en Valencia. Pintó excelentes paisajes, pero su obra principal es la Asunción y coronación de la Virgen que se puede admirar en la catedral de Segorbe. Uno de los maestros fue Grabriel Puig Roda, natural de Tirig que aprovechó muy bien los años que pasó en roma becado por la Diputación.  Otros pintores excelentes fueron: Carbó, Mundian, Cruella y Sorbías y sobre todo Vicente Castell, profesor de diferentes pintores y escultores que deben ser incluidos ya en los artistas del siglo XX.

miércoles, 6 de enero de 2016

CAPÍTULO XXVI.- GONZÑALEZ CHERMÁ. AMADEO DE SABOYA. HUERTO DE SOGUEROS. I REPÚBLICA ESPAÑOLA

Numerosos castellonenses se sublevaron en agosto de 1867 contra el gobierno de la nación. Algunos notables políticos habían formado una junta revolucionaria y al igual que en otras provincias iniciaron su actividad a favor de la revolución. Francisco González Chermá y otros representantes del
pueblo fueron arrestados y sufrieron prisión en Valencia, hasta que el estallido de la revolución de 1868 los puso en libertad.
   Durante el reinado de Isabel II la monarquía española fue perdiendo poder a favor del Parlamento. No lo hizo a través de algún proceso democrático, sino por la presión del ejército. A partir de la revolución y la huída de la Reina, se convocaron las Cortes y fue proclamada la constitución de 1869. España se decidió a ser gobernada por una monarquía parlamentaria. Solo faltaba encontrar al candidato. A instancias del general Prim, los parlamentarios consideraron que el hijo del Rey de Irtalia y de la biznieta de Carlos III de España, reunía las condiciones necesarias para acceder al trono español. Fue votada su candidatura por el Parlamento y a pesar de que no todos los diputados la consideraron apropiada,  Amadeo de Saboya se convirtió en el primer monarca español elegido parlamentariamente.
La gran novedad de contar con un rey que había sido elegido por las urnas, lejos de aceptarse, causó gran malestar entre los monárquicos, carlistas, republicanos e incluso en el seno de la Iglesia. Para complicar más las cosas, la víspera de que el nuevo rey desembarcara en Cartagena, el general Prim fue asesinado en Madrid. El segundo día del año 1871 llegó don Amadeo, junto con su esposa a la capital del Reino. Después  de visitar el cadáver del general asesinado, que se encontraba en la basílica de Nuestra Señora de Atocha y prestar el correspondiente juramento, fue proclamado Rey de España. Aunque el nuevo Rey no consiguió convencer al pueblo que siempre pensó que era un extranjero alejado de los problemas del país e incluso, por algunos, era considerado gafe, fue decisivo para Castellón de la Plana puesto que durante una  visita a la capital de la Plana en 1871, los representantes del gremio de sogueros le hicieron llegar la noticia de que el huerto que ellos utilizaban junto a la plaza Nueva, como consecuencia  de las leyes desamortizadoras, iba a ser subastado por el Ayuntamiento. Todo parecía indicar que los terrenos pasarían a manos privadas y si ello ocurría, los trabajadores del cáñamo deberían pagar un alquiler al nuevo propietario. Don Amadeo comprendió que los sogueros no continuarían con su lugar de trabajo porque tampoco podían hacer frente a la cantidad por la que se ponía a la venta. El Rey quiso impedir la celebración de la subasta, pero al no conseguirlo, entregó a los responsables del gremio la cantidad necesaria para que pudieran comprar el huerto al Ayuntamiento, con lo cual, se les pudo adjudicar los terrenos necesarios para continuar trabajando, hasta que muchos años más tarde lograron un acuerdo con las autoridades locales para convertir su huerto en la actual plaza del Huerto de Sogueros.  
   Al estallar la tercera Guerra Carlista, el ejército propuso que se volviera a la monarquía absoluta, pero el Rey no aceptó y el 11 de febrero de 1873, renunció al trono español y se refugió en la embajada italiana de Madrid, creándose así un clima contrario a la monarquía y las Cortes proclamaron la I República Española que no tuvo una larga historia, puesto que el 29 de diciembre de 1874 se restauró la monarquía borbónica, después de una experiencia republicana de apenas dos años.